LA VEGA. Pérdidas millonarias dejó un siniestro que
desde la madrugada de ayer hasta las primeras horas de la tarde, arrasó con al
menos 200 negocios establecidos en el mercado público de esta localidad.
Y gracias a la intervención del Cuerpo de Bomberos de aquí, en
el siniestro no se
produjeron víctimas humanas. Dos bomberos se desmayaron por cansancio en las labores de extinción, y fueron atendidos en un centro de salud de la ciudad.
produjeron víctimas humanas. Dos bomberos se desmayaron por cansancio en las labores de extinción, y fueron atendidos en un centro de salud de la ciudad.
César Abreu, intendente general del Cuerpo de Bomberos explicó
que para sofocar por completo el fuego, fue necesario utilizar 17 camiones y la
ayuda de algunos voluntarios que se presentaron al lugar del siniestro, cuyas
causas se investigan. Se trata de determinar si fue un cortocircuito o la
explosión de un tanque de gas.
“No hemos terminado la evaluación, pero podemos informar que son
más de 200 los negocios reducidos totalmente a cenizas, porque los tres niveles
del edificio con que cuenta el mercado fue afectado en más de un 100 por
ciento”, declaró Abreu.
Dijo que a los bomberos se les hizo más difícil sofocar el fuego
en varias horas debido a la gran cantidad de tarantines y portones que había en
los pasillos del mercado, así como los materiales plásticos y de madera que se
incendiaban con gran intensidad.
Comerciantes consultados declararon que las llamas consumieron
todas las mercancías.
El administrador del mercado, Diógenes Neris, informó que se
tienen varias versiones sobre el origen del fuego y una de ellas indica que
habría sido por la explosión de un cilindro de Gas Licuado de Petróleo (GLP), y
un cortocircuito.
Personas que se encontraban en el lugar al momento del fuego,
declararon que había luz o energía eléctrica. Hace 21 años ocurrió otro
incendio aquí, pero no con la magnitud del de ayer. El mercado público local
está ubicado entre las calles Núñez de Cáceres, Pedro Ayala y Juana Saltitopa.
En el lugar permanecen agentes policiales vigilando la zona afectada, para
evitar saqueos.