Un día como hoy, de 1961, un grupo de patriotas puso fin a
la vida de Rafael Leónidas Trujillo Molina, tras 31 de opresión y tiranía.
Fue ajusticiado en plena autopista, en la noche por hombres que decidieron poner fin a una larga carrera de crímenes bajo un régimen de terror,
con la desaparición de miles de ciudadanos y la negación de derechos y libertades.
Fue ajusticiado en plena autopista, en la noche por hombres que decidieron poner fin a una larga carrera de crímenes bajo un régimen de terror,
con la desaparición de miles de ciudadanos y la negación de derechos y libertades.
Desde la noche de su ajusticiamiento cuando se dirigía a su
hacienda en San Cristóbal, comenzaron a aflorar en el país los cimientos de la
democracia y a restablecerse un nuevo orden.
En ocasión de los acontecimientos conmemorados, hoy
dominicanos pertenecientes a organizaciones antitrujillistas participan en
actos ante el monumento levantado en el lugar del tiranicidio, en homenaje a
los protagonistas del hecho que luego sufrieron una encarnizada persecución
Historiadores citan entre los hechos que precedieron y que
detonaron la caída de la dictadura el secuestro en Nueva York y posterior
asesinato en República Dominicana del catedrático vasco Jesús de Galíndez el 12
de marzo del 1956. El crimen de las hermanas Patria, Minerva y María Teresa
Mirabal junto a su chofer Rufino de la Cruz el 25 de noviembre de 1960.
Además, la millonaria inversión en la “La Feria de la Paz y
Confraternidad del Mundo Libre” en la llamada “Ciudad Trujillo”, actual Santo
Domingo, desde el 20 de diciembre de 1955 al 31 de diciembre de 1956 en la que
participación representaciones de 42 países y en la que coronó a su hija
Angelita como “Reina de la Feria de la Paz”, con apenas 16 años y vistiendo un
traje bordado con 60 pieles de armiño ruso, a un costo de US$80,000.
También la persecución y muerte de los integrantes del
Movimiento Clandestino 14 de Junio, creado el 10 de enero de 1960 por jóvenes
que lucharon por derrocar la dictadura de Trujillo y que se unieron a partir de
las fallidas expediciones de Constanza, Maimón y Estero Hondo, en la que el
Servicio de Inteligencia Militar (SIM), un aparato al servicio del crimen de
Trujillo, liquidó a muchos de sus integrantes y torturó a otros en las cárceles
de la época, como las de “La 40” y el Kilómetro 9.
Las hermanas Mirabal, Minerva, Patria y María Teresa, bajo
el seudónimo de “Las Mariposas”, pertenecieron al 14 de Junio, desde el cuyal
combatieron a la tiranía trujillista junto a su fundador, Manuel Aurelio
Tavárez Justo (Manolo), esposo de Minerva.
Los complotados: Al reinado de horror de Trujillo, que era
llamado “El Jefe” o “El Benefactor de la Patria y Padre de la Patria Nueva” y
que gobernó de 1930 hasta 1961, con cuatro presidentes títeres, le pusieron fin
Luis Amiama Tió, Pedro Livio Cedeño, Antonio de la Maza, Modesto Díaz Quezada,
Juan Tomás Díaz Quezada, Roberto Pastoriza Neret, Luis Manuel Cáceres Michel
(Tunti), el teniente Amado García Guerrero, Huáscar Tejeda Pimentel, Salvador
Estrella Sadhalá y el general del Ejército Nacional Pupo Román.
Del grupo que actuó en el tiranicidio vive Antonio Imbert
Barrera, que fue uno de los ejecutores directos en la noche del 30 de mayo.